Mejores momentos | 23 de febrero
Cuando la veterinaria acude a la granja de unos pacientes, descubre que el potro al que va a visitar tiene diferentes heridas en partes del cuerpo.
Los potros siempre son muy activos, tanto que muchas veces acaban haciéndose heridas por todo el cuerpo.
Pero esta vez las heridas han ido a más y las inflamaciones del potro son más evidentes. Por eso sus dueños han decidido llamar a la veterinaria Brenda, para que le haga un examen completo y así ponerle una solución.
A primera vista las heridas son de jugar o de haberse chocado con otros caballos, por lo que Brenda decide actuar y le da un tratamiento de choque para que la inflamación baje y el pobre potro pueda relajarse, ya que del estrés se está haciendo más daño.
¿Quieres ver el diagnóstico final de la doctora? Lo tienes en el video que encabeza la noticia.