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Chip y su hija Carol usan ramas de sauce para preparar trampas con las que cazar conejos.
En Noorvik, a 31 kilómetros al norte del círculo polar ártico viven Chip y Agnes Hailstone con sus hijas. Chip le va a enseñar a su hija, Carol, cómo seleccionar ramas de sauce para preparar trampas para las libres de las nieves, lo que comúnmente conocemos como conejos pequeños. "Necesito que aprenda para que luego sea capaz de hacerlo ella sola", afirma el padre de familia y añade: "Quiero que mi hija aprenda que en la naturaleza puede encontrar los materiales que necesita y los animales que busca".
En total, preparan 35 trampas que distribuyen por el perímetro donde han encontrado huellas. Es muy importante colocar bien el cepo. Chip explica a su hija cómo situarlo. Debe ponerlo a una cierta altura del suelo para que sea efectivo. De esta manera, el animal quedará atrapado por la cabeza y no por sus patas.
Al final, consiguen cazar unos cuantos conejos para poder alimentarse en las frías noches de invierno. Para ellos, la liebre de las nieves es una de sus principales fuentes de carne y protenía en Alaska.