Momento destacado | 2 agosto
Llega a la tienda de las restauraciones un oso de peluche que no le permiten la entrada en Australia por su material de relleno.
Un oso de peluche llega a la tienda de las restauraciones. Con más de 50 años de antigüedad, este peluche se compró para María, la hija mayor del matrimonio que ha llegado al taller. Tras muchos años jugando con él, esta bastante desgastado porque María y todos sus hermanos jugaban con Freud Bear. Ahora, María se ha ido a Australia y no le han permitido pasar al osito por la aduana australiana porque está relleno de material vegetal y son muy estrictos.
La misión que tienen las restauradoras es hacer que este osito de peluche esté en forma para que pase los estrictos controles de aduana de Australia. Sus extremidades están sujetas con alfileres y con una arandela que les pone complicaciones a las restauradoras en el taller. Este oso de suco, una de las marcas más famosas en peluches, es de un material con muy buena calidad y de origen alemán, ¿Podrá pasar por la aduana para reencontrarse con María tras el cambio de look?