El Barcelona está sumido en una realidad económica y deportiva complicada. El club tiene una deuda de más de 1350 millones de euros y está teniendo uno de los peores arranques ligueros de los últimos veinte años.
Sin embargo, no acepta que nadie ningunee al equipo de sus amores y se ha revelado contra todos los que infravaloran al club: "El Barcelona es un transatlántico". Y ojo, porque su discurso ha desatado los aplausos de Pedrerol.